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NOVEMBRE 2017
ESPAI D’OPINIÓ DELS GRUPS MUNICIPALS
El 25 de noviembre se celebra el Día Mundial
contra la Violencia de Género. Para acabar con
ello debemos atacar la raíz del problema, la cul-
tura patriarcal que inunda nuestra sociedad, o,
dicho de otra manera, el machismo diario y su-
til llamado «micromachismo».
Los «micromachismos» se generan por la
creencia popular de sentir al hombre superior
a la mujer. ¿Cuántas mujeres han sentido que
sus opiniones en el trabajo se tienen menos en
cuenta por el simple hecho de ser mujer?, ¿o
han escuchado frases como «tienes mala cara,
maquíllate un poco»? ¿Y del hecho de que las
mujeres entren gratis o con descuento en la
mayoría de discotecas? La única razón por la
que eso ocurre es para atraer a más hombres
al local;
somos tratadas como un simple pro-
ducto de mercado
, y, desgraciadamente, eso
es aceptado por la sociedad. ¿Cómo te sientes
al volver caminando sola a tu casa? Cuando
tienes que pasar por unas calles más solita-
rias y sientes unos pasos detrás de ti, cada vez
vas acelerando más el paso, llegas a casa y te
sientes tonta por haber sentido miedo, pero no
puedes evitarlo porque «no es seguro que vaya
una mujer sola por la calle». Nos han inculcado
que las mujeres somos el sexo débil, que debe-
mos estar al lado de un hombre para sentirnos
seguras, y a los hombres les han inculcado que
no deben sentir miedo y se ven cohibidos por
miedo a que los consideren «nenazas».
Para acabar con la violencia de género hay
que acabar con la consideración de la mujer
como un ser inferior. Está en la mano de todos
acabar con los «micromachismos» de esta so-
ciedad patriarcal.
Posiblemente a estas alturas ya exista una parte
considerable de la población de Cataluña cansa-
da por la actual situación política. Curiosamente,
ya no se habla de corrupción, de paro, de recor-
tes, de sueldos vitalicios… y, en cambio, oímos
mucho las palabras «legalidad» y «legitimidad».
Analizando el discurso de una declaración
de independencia, vamos a fijarnos en una de
las negociaciones europeas que se presupone
de las más duras, complejas y duraderas. Nos
referimos al
Brexit
. Es obvio que no se trata de
la creación de un nuevo país, pero el abandono
de la UE por parte de una economía locomotora
acarrea consecuencias económicas y políticas. Y
se trata de un acto totalmente consensuado por
ambos actores. Cierto es, con la gran diferencia
respecto al caso catalán, que el pueblo británico
votó en referéndum con garantías (resultado por
el que muchos ya se arrepienten). Así lo prevé el
TUE: cualquier estado de la UE puede activar el
mecanismo de la salida. Nueve meses después
del referéndum Gran Bretaña impulsó el inicio
de las negociaciones. Marzo de 2019: esa será la
fecha máxima (salvo unanimidad de la Europa
de los 27 de conceder una prórroga) para que las
dos partes lleguen a un acuerdo; ¡2 años! 2 años
y con el beneplácito de que tanto unos como
otros están condenados a entenderse.
Dicho esto, ¿es posible que una parte de Es-
paña pueda autoproclamarse independiente?
¿Sería ese estado reconocido por las institucio-
nes europeas?
Por cierto, ¿será casualidad que las empresas
«huyan» de Cataluña al resto del Estado, al igual
que las empresas con sede en Gran Bretaña mar-
chan a Alemania?
Els compromisos, com les promeses, són una
obligació de qui els contrau en llibertat. Quan
aquests compromisos/promeses els fa un al-
calde o alcaldes tenen un valor encara més
especial.
Un bon alcalde ha de complir escrupolo-
sament les seves promeses i en el termini i/o
temps indicat. No valen els jocs de paraules per
a deixar les coses fins a les properes eleccions.
Un bon alcalde vetlla per una bona gestió,
tant administrativa com financera, tant al cen-
tre de la nostra vila com als nostres barris i ur-
banitzacions.
Un bon alcalde vetlla per la seguretat dels
seus ciutadans. Sense excuses!
Un bon alcalde és just amb els veïns i veïnes,
tant si l’han votat com no. Mai pot ser un secta-
ri,
ja que governa per a tothom
.
Malauradament, els senyors «dos» alcaldes
d’aquesta legislatura estan ben lluny de tot
això. Han demostrat no tenir paraula, ser uns
mals gestors i governar per a uns quants, a més
d’estar més pendents de les càmeres (foto) que
dels autèntics problemes reals del nostre poble.
Ara seran aprovades les ordenances fiscals
sense comptar amb l’oposició, quan l’any pas-
sat el Sr. Regidor d’Hisenda es va comprometre
a escoltar les propostes de l’oposició. Res de
res!
Tenim uns alcaldes que no compleixen les
seves promeses i, a més a més, un Govern que
no escolta les propostes de l’oposició i l’únic
que fa és MANAR, però no GOVERNAR.
Bona Castanyada a tothom!
«Nenazas» y otros micromachismos
¿Alguien se lo cree?
El valor de les promeses
Iván Buendía Romea
Sandra Bernad Martínez
Francisco Ibáñez López
